En una emotiva ceremonia realizada en el auditorio de AIEP Barrio Universitario, se llevó a cabo el cierre y reconocimiento del “Proyecto de Educación para la Reinserción Social”. Este proyecto, parte del mecanismo de Vinculación con el Medio (VcM) «Impulso Laboral para la Sociedad», celebró los logros de estudiantes, docentes y beneficiarios que participaron en este ciclo transformador.
Un camino de colaboración y crecimiento
AIEP y Gendarmería de Chile trabajan en conjunto desde el año 2019. Con presencia en cinco regiones del país, sus iniciativas se caracterizan por un enfoque integral que trasciende la capacitación técnica. Incluyendo componentes psicopedagógicos, apoyo infantil y talleres diseñados para fortalecer habilidades sociales, emocionales y emprendedoras.
Estos programas se adaptan a las necesidades específicas de cada grupo, considerando sus intereses y contexto sociocultural. Entre las iniciativas más destacadas de esta alianza se encuentran el centro de estética «Crea Belleza» en Concepción y Rancagua, el programa “Aprende y Emprende” en Santiago, la Formación para el Emprendimiento en Rancagua, la Intermediación Laboral en Calama, entre otros.
El “Proyecto de Educación para la Reinserción Social” ha mostrado un crecimiento exponencial. En su versión 2025 expandió su alcance de 2 a 5 sedes, entre ellas AIEP Bellavista, AIEP Barrio Universitario, AIEP Puerto Montt, AIEP del Mar y AIEP Antofagasta. Los indicadores reflejan este éxito: la participación estudiantil saltó de 6 a 40 estudiantes, mientras que los beneficiarios directos aumentaron de 15 a 36, con un índice de satisfacción del 76% (NPS).
Voces de la reinserción
Durante la jornada, autoridades y participantes compartieron reflexiones sobre la contribución de los talleres. Estos abordaron temáticas como finanzas personales, emprendimiento, derechos laborales y autoconocimiento.
Pablo Gaete Letelier, subdirector de Reinserción Social de Gendarmería, destacó el valor humano del programa:
Pablo Gaete Letelier
Subdirector de Reinserción Social de Gendarmería“A veces hablamos de 'convenios' como palabras frías, pero lo que ha pasado aquí es algo profundamente virtuoso. Los estudiantes aprendieron de la resiliencia de quienes han estado en conflicto con la ley, y los beneficiarios obtuvieron herramientas para tomar las riendas de su futuro con dignidad”.
Por su parte, Lorena Baus, directora de la Escuela de Administración y Gestión Empresarial, subrayó la evolución técnica: “Pasamos de un piloto de educación financiera a un programa de formación integral para la reinserción. Ver a nuestros estudiantes y beneficiarios como protagonistas nos confirma que estos proyectos contribuyen de manera real a la comunidad”.
En tanto, Paola Ibáñez, directora de la Escuela de Desarrollo Social y Educación, enfatizó la sinergia institucional: “Unimos dos escuelas con un objetivo común. Al trabajar de forma horizontal, demostramos que la excelencia y la responsabilidad social son el camino para abrir nuevas oportunidades en una sociedad que necesita más alternativas”.
El testimonio de un beneficiario
El éxito de este proyecto se refleja en la vida de sus participantes. Arnoldo González, beneficiario del programa, compartió su potente testimonio sobre cómo la educación y el apoyo institucional se traducen en segundas oportunidades reales.
“Participar en este programa fue una gran oportunidad: me permitió cambiar el rumbo de mi vida y demostrar que, con apoyo y educación, sí es posible salir de la mala vida y construir un futuro distinto”, afirmó González.
Además, agregó con emoción: “Hoy llevo dos años en libertad y, aunque no ha sido fácil, le hemos demostrado a la sociedad y al sistema que podemos salir adelante, recuperando no solo lo material, sino también la dignidad, la confianza y el amor de nuestras familias”.
Contribución en la formación estudiantil
La ceremonia también dio espacio al testimonio de los estudiantes, representados por Claudia Lara (AIEP Barrio Universitario), quien valoró la experiencia como un hito ético: “Pudimos aplicar lo aprendido en el aula a una realidad desafiante. Comprendimos que la intervención social puede transformar vidas cuando se usa con sentido humano. Invertir en reinserción no es un gasto, es una apuesta por una sociedad más segura”.
Tras la entrega de reconocimientos a quienes destacaron por su esfuerzo y dedicación, Farid Elfar, director de AIEP Barrio Universitario, calificó la alianza entre el mundo público, privado y educativo como un «tridente mágico» que motoriza el cambio social y fortalece las competencias de los futuros profesionales.
Con el cierre de este ciclo, AIEP reafirma su compromiso con la innovación social, proyectando nuevas versiones de este proyecto para seguir construyendo puentes de oportunidad y dignidad en todo el país.
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